El trabajo en conjunto del Big Data y AI es muy beneficioso para las empresas, gracias a la capacidad de aprendizaje automático.
La implementación de estas disciplinas han permitido el análisis con igual y mejor calidad, ya que hoy existen datos en formato de imagen, video, texto y voz, siendo recíprocos uno con otro.
Si bien AI permite minimizar el tiempo de análisis, depende en gran medida de big data, ya que deberá sacar su máximo potencial para comprender los datos, a medida que ingresan a través de modelos de automatización y de esta forma comenzar a resolver problemas que se presenten a futuro.
Será necesaria una infraestructura, preparación y gobernanza, para el emparejamiento de Big Data e inteligencia artificial. Estas tecnologías son clave para las organizaciones que abordan complejidades operativas de almacenamiento y otros problemas, que pueden ser solucionados con estas seis tendencias:
- Creación de nuevos métodos para analizar datos.
- Facilidad para el análisis de datos.
- Implicación humana en los procesos de análisis.
- Utilización de Inteligencia Artificial y aprendizaje automático en problemas comunes de datos.
- Predicción y prescripción en la formación analítica.
- Descubrir cada día más de la relación entre Inteligencia Artificial y Big Data.
Se puede generar un algoritmo que tome decisiones basado en datos pasados y presentes, a través del análisis prescriptivo, que aprovecha la inteligencia artificial y su potencial para proporcionar información estratégica prospectiva ayudando en decisiones que posiblemente se deberán tomar.
Por lo anterior, crear una solución que permita predecir respuesta favorecerá en la toma de decisiones, permitiendo crear estrategias y modelos más acertados. Sin embargo, la creación y posterior implementación de estas estrategias se deben realizar en conjunto a expertos para lograr reales resultados.
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